La importancia de los jingles en campañas políticas

El gran compositor estadounidense Leonard Bernstein lo dijo una vez: “La música puede dar nombre a lo innombrable y comunicar lo desconocido” ¡Y no puedo estar más de acuerdo! La historia de la humanidad no sería lo mismo sin la aparición de la música. Esa conexión desde lo cognitivo, lo físico y lo emocional ha marcado un antes y un después. Las canciones se han convertido en baúles del tiempo que han permeado en todos los ámbitos de la vida, incluso en el mundo político, a través de los jingles.


Los jingles son piezas publicitarias que han hecho eco en momentos trascendentales de movimientos políticos y causas adelantadas por diferentes líderes alrededor del mundo. La composición producida por quienes apoyaban el “No” del plebiscito que se realizó en Chile durante 1988 para derrocar a Pinochet, es un ejemplo claro de la importancia de los jingles en campañas políticas.


“¡Chile, la alegría ya viene! ¡Chile, la alegría ya viene! Porque diga lo que diga, yo soy libre de pensar, porque siento que es la hora de ganar la libertad…”. Estas fueron palabras tan acertadas para el momento coyuntural que atravesaba el país, que su mensaje, hasta el día de hoy, resuena en mi cabeza. Tanto, como “Yes We Can” (Sí se puede), la canción que will.i.am produjo en torno a un eslogan y discurso de campaña de Barack Obama en 2008.


Sin embargo, en muchas ocasiones estas piezas son subestimadas dentro de los procesos y terminan siendo compuestas por cualquiera. A veces son construidas por un champetero, salsero, carranguero o vallenatero que poco o nada sabe de lo que se pretende comunicar. Pero realmente se trata de composiciones tan importantes que deberían utilizarse no solo en el desarrollo de una campaña política, sino durante todo el ejercicio de gobierno.

Los componentes claves de los jingles


Como estratega, he tenido la oportunidad de participar en la creación de múltiples jingles, y aquí debo resaltar el extraordinario trabajo realizado por Leo Palencia. Considero que sus capacidades musicales lo podrían poner en los primeros lugares de Latinoamérica como desarrollador de estas piezas publicitarias. Él, quien es director creativo de www.elestudio.co, tiene la capacidad de generar sensaciones positivas por medio de increíbles acordes musicales en tan solo 30 segundos. Evidencia de esto, por mencionar solo dos casos, son los trabajos realizados para el senador Miguel Ángel Pinto: “Yo pinto bien”; y para el actual alcalde de Piedecuesta, el Dr. Mario José Carvajal: “El poder de la gente”.


En términos generales, y entendiendo que los jingles hacen parte de las piezas publicitarias fundamentales para llevar a cabo una buena comunicación dentro de las campañas políticas, estas composiciones necesitan ser precisas y cortas. Además, deben tener un mensaje claro, incluyente y agradable que vaya acorde a la razón de ser, en este caso, del candidato.


En campañas, he tenido la oportunidad de oír jingles muy mal elaborados a nivel musical. Producciones supremamente mediocres ¡o sin producción alguna! Composiciones en las que no se ha tenido en cuenta ni el nombre, ni el partido, ni el número del candidato. Pasando por alto el entorno, el tipo de campaña y el para qué de la misma, desconociendo por completo la esencia de la marca.


Finalmente, creo que para la realización de un jingle político, sí o sí, debe haber un trabajo mancomunado entre la línea estratégica comunicacional y quien desarrolla y hace la producción del mismo. De igual forma, se deben tener en cuenta palabras y frases de poder que identifiquen al candidato y hagan parte de su discurso. Los jingles deber ser armónicos, pegajosos, precisos y afines a la causa para la que se crean. Solo así se verá reflejado el ADN de las mismas y se podrá hacer clic con las audiencias.